GenshinData-1/Readable/ES/Relic15023_4_ES.txt
2022-05-27 01:44:24 -03:00

19 lines
1.4 KiB
Plaintext

En los antiguos peñascos de color cinabrio alguna vez floreció una hermosa flor.
En la época en la que la sangre oscura y corrompida corría por el mundo, ni un ápice de fango llegó a mancharla.
En aquel entonces, las rocas mantenían su tenacidad y los peñascos permanecían inamovibles incluso ante la amenaza de monstruos malignos de las tinieblas.
Los taciturnos pobladores de las montañas y la brillante luna férrea le construyeron un tranquilo destacamento.
“Hija de las montañas escarpadas y de la arena cristalizada, por favor, no llores por mí.
Nací bajo la sombra de Tianheng para luchar y retribuirle a Rex Lapis.
Mi vida que encomiendo al Yaksha de cuatro brazos al dirigirme hacia la guarida luminiscente...
El sombrío camino de las oscuras cuevas y los minerales que flotan en escarpados peñascos...
La marea de contaminación que emerge del abismo y los monstruos malignos que se resguardan en lo más profundo de la montaña...
El miedo y lo inconcebible no son cosas que me produzcan terror”.
El viento de la noche interrumpió al soldado de la Geoarmada, que no pudo decir sus palabras de adiós.
Solo le dejó esta pequeña flor a la hija de los habitantes de las montañas como recuerdo.
“Mis únicos miedos y preocupaciones son el olvido y la pérdida.
Así pues, si tengo la desventura de acabar enterrada en un lugar sin nombre, les ruego que nunca me olviden”.